Gracias por darme unas llaves
Gracias porque abren una puerta
Gracias por la cama al final del pasillo
Por darme una almohada para que duerma
Cuando me quede sin dinero
Y no tenga donde caerme muerto
Me acordaré de este momento
Voy repitiendo entre dientes:
"vaya suerte que tengo"
Gracias por darme unas manos
Gracias por el pulgar opuesto
Gracias por las teclas que se deslizan
Formando un mensaje de correo
Cuando me quede sin empleo
Y no tenga donde caerme muerto
Me acordaré de este momento
Voy repitiendo entre dientes:
"vaya suerte que tengo"
